NOMBRE: Ramón F. G.
EDAD: 46
LOCALIDAD: La Coruña, España
¿A qué SITUACIÓN te enfrentas?: Discriminación, Acoso
¿En qué ENTORNO se producen estos acontecimientos? Laboral (en mi trabajo), Con allegados y Relaciones Personales o Sociales (familiares, amigos, compañeros, vecinos, etc), Administraciones públicas (policía, guardia civil, servicios sociales, servicios de salud, educativos, etc)
¿Quién o quiénes te afectan? Sanitario: sanitarios, auxiliares, enfermeros, médicos (por menciona la especialidad) personal administrativo, celadores, personal de seguridad, etc), Familiares: (padres, hijos, esposos, cónyuges, parejas, etc) o Conocidos o allegados: (amigos, compañeros, vecinos, etc
FECHA de entrada de testimonio: 31 de Marzo de 2023
TESTIMONIO:
En Marzo del 2020 empezó el infierno. Unos lo supimos y otros no. En mi caso, no sabía nada sobre quiénes o qué causas lo estaban causando pero sí sabía lo que se estaba haciendo con los ancianos, mientras los amigos colgaban fotos del encierro disfrutando de cervezas y pizza como si estuviesen de vacaciones mientras se apilaban los ataúdes.
Les intenté avisar sobre lo oscuro de los contratos de las farmacéuticas y de las posibles consecuencias de experimentó génico. No lo quisieron oír y me trataron de loco, egoísta, narcisista e irresponsable. Algún ex amigo, que ahora los son todos, disfrazaba su miedo de falso altruismo diciéndome que, me estaba protegiendo al vacunarse.
Tengo un diagnóstico de TPB tipo II, (transtorno de personalidad) que si lo sumamos a mi posicionamiento, significándome demasiado en contra del experimento, recibí un acoso sistemático de amigos y familiares para que me inoculara. Incluso me estaban forzando a ir al psiquiatra argumentando que estaba psicótico. (La verdad, tiene gracia, la masa psicótica decidiendo quien lo está y quien no).
Mi hermana argumentaba a mi tío que tenía que caer mentalmente enfermo para ingresar y recibir un tratamiento adecuado.
Incluso estaba esperando a que me ingresaran por covid y me derivaran al psiquiátrico. El mismo psiquiátrico en que están aplicando estos días la TEC modificada a Iván.
Actualmente ejerzo de patrón en una embarcación y he pasado el reconocimiento médico, pero me están obligando a ir al psiquiatra y que reciba los informes necesarios para poder seguir ejerciendo. Simplemente los detesto, me cronificaron. Si soy funcional es “gracias a ellos” y sino lo fuese sería culpa mía.
El caso de Iván me ha afectado profundamente. https://t.me/AfectadosPorLasVacunas/1694
En relación al resto de masa social, colegas de trabajo me han dicho que no tendría derecho a usar los servicios públicos de salud, no pude entrar en el hospital cuando mi madre fue a urgencias, no pude comer en restaurantes, en el pueblo me señalan como un negacionista antivacunas.
Vivo sólo y mi única distracción es el trabajo y la lectura. La sociedad me da asco y me repugna. Tímidamente, ahora algunos me empiezan a darme la razón y otros me dicen que he tenido mucha suerte al no vacunarme. Maldita la suerte, que he perdido a amigos y familia. A veces deseo haber sido como ellos, haberme vacunado y no sentirme tan sólo y tan odiado.
Quizás todo lo que vivimos fue necesario, quizás todo este sufrimiento tenga algún sentido y propósito. Dicen que el sufrimiento nos hace mejores, quizás la sociedad iba por mal camino, un camino cuyo sus únicos objetivos eran únicamente materialistas. Donde el bien y la justicia eran relativos y no absolutos. Quizás recuperemos unos valores que hemos perdido gracias a una ciencia sin alma y a un Estado que nos polariza y debilita.
Quiero pensar así y creer que todo lo malo que he vivido era necesario ser vivido.